Durante años, George Kramb, quien tiene 29 años y vive en San Diego, California, pensó que tenía un caso grave de piel seca.
“Tuve piel seca básicamente toda mi vida. Siempre estaba escamosa, irritada e incluso llegaba al punto de agrietarse”, dice. A veces, en invierno, tenía los dedos tan agrietados y secos que no podía abrir las manos.
Kramb probó ungüentos de venta libre como Aquaphor, Cetaphil y Gold Bond. “Utilicé prácticamente todas las lociones y ungüentos que vende CVS y nada funcionó. Me proporcionaba alivio temporal pero no abordaba el problema subyacente”, afirma.
Lo que Kramb no sabía era que no sólo tenía la piel seca. Tenía dermatitis atópica. “No fue hasta que llegué a la adolescencia y visité a un dermatólogo que obtuve un diagnóstico adecuado”, dice.
¿Qué es la dermatitis atópica?
La dermatitis atópica (DA) es una afección de la piel en la que aparecen y desaparecen erupciones que pican. Suele estar asociado a algún tipo de alergia.
“A diferencia de la piel seca, la DA es una enfermedad inflamatoria crónica", dice la Dra. Annabelle García, MD, dermatóloga certificada y propietaria de Sonterra Dermatology en San Antonio, Texas. “Los síntomas suelen aparecer como una erupción en la piel. En su forma moderada a grave, la DA puede causar picazón constante, lo que puede provocar grietas y sangrado en la piel”.
Algunos síntomas comunes de la DA en la piel incluyen:
- piel seca y que pierde su color
- picor
- dolor en la piel
- erupciones que pueden supurar líquido o sangrar al rascarse
- problemas para dormir debido a la picazón
- piel gruesa y endurecida por rascarse
Los expertos no saben exactamente qué causa la DA, pero puede estar relacionada con los genes y el entorno. Si tienes, o tus familiares tienen, asma o alergias, es más probable que tengas DA.
“La dermatitis atópica suele comenzar en la niñez, pero puede aparecer a cualquier edad”, dice García. Para algunas personas, disminuye a medida que envejecen. Otros lo tienen toda su vida. La DA puede mejorar en ocasiones y luego reaparecer en otras.
¿En qué se diferencia la DA de la piel seca?
La DA es más que piel seca. "Tanto la piel seca como la DA pueden hacer que la piel se vuelva escamosa, pero la DA también puede incluir erupciones rojas u oscuras y picazón persistente que puede provocar lesiones cutáneas supurantes y sangrantes", dice García.
Si tienes DA, es posible que tengas un ciclo de picazón y rascado. El sarpullido te pica, por lo que te frotas o te rascas la piel. Eso causa más irritación y picazón, por lo que el ciclo de picazón y rascado continúa.
Con la DA, una enfermedad crónica provoca los síntomas, dice García.
Obtener el diagnóstico correcto
La dermatitis atópica puede ser difícil de diagnosticar, afirma García. Tu sarpullido puede parecerse a psoriasis o hiedra venenosa. Si tienes la piel oscura, es posible que se note menos y que lleve más tiempo obtener el diagnóstico correcto.
Si tienes un sarpullido que te pica, consulta con tu médico. "Es importante saber si tienes DA para poder tomar las medidas necesarias para controlar la salud de tu piel y encontrar un tratamiento adecuado", dice García. Las cremas tópicas pueden ayudar con los síntomas de la piel seca, pero es posible que necesites un tratamiento más fuerte para atacar la causa.
Kramb se sospechaba que su piel seca podría ser DA porque algunos brotes eran graves. “Mi teoría se confirmó cuando me reuní con el dermatólogo, me recetaron mi primera pomada con esteroides y vi mejoría”, dice.
Tratamientos para la DA
Encontrar un tratamiento que funcione para tu caso particular es un proceso. Si uno no funciona, tu médico puede recomendarte otro.
A Kramb le tomó un tiempo encontrar la combinación adecuada. Probó una variedad de tratamientos recetados y de venta libre, pero no le ayudaron. Más tarde, descubrió que los ungüentos y las cremas con esteroides le funcionan mejor.
Kramb dice que enterarse de que su piel seca era dermatitis atópica lo inspiró a ayudar a los demás. Creó PatientPartner, que ayuda a las personas que tienen condiciones de salud similares a conectarse entre sí para que puedan aprender unos de otros.
"Muchas personas están nerviosas y temen hablar sobre sus afecciones de salud con otros", dice Kramb. "Quería crear un lugar seguro para que compartieran unos con otros para que pudieran aprender y construir una comunidad".
